Tipos de mamografía: lo que toda mujer debe saber

female patient getting a mammogram

Realizarse una mamografía puede generar una mezcla de emociones y dudas. Es completamente normal preguntarse: “¿De verdad es necesario?” o “¿Qué pasa si encuentran algo?”. También es natural tener dudas más prácticas, como “¿Necesito una mamografía de detección o una diagnóstica?” o “¿Qué es una mamografía 3D?”.

“No es raro que las mujeres tengan muchas preguntas sobre mamografías, especialmente si es su primera vez”, señala la Dra. Luz Venta, radióloga de mama en el Hospital Houston Methodist. “Hay mucha terminología y tecnología que vale la pena conocer cuando el médico menciona que es momento de hacerse una mamografía”.

La Dra. Venta explica qué deben saber las mujeres sobre los diferentes tipos de mamografías y otro factor importante que conviene tener en cuenta.

¿Qué es una mamografía?

Una mamografía es un tipo de radiografía especializada que ayuda a detectar anomalías en las mamas. Este estudio de imagen permite obtener vistas detalladas del tejido mamario, para que el radiólogo pueda examinarlo cuidadosamente y detectar cualquier cambio o irregularidad. Es un procedimiento rápido y, por lo general, sencillo, que puede desempeñar un papel fundamental en la detección temprana del cáncer de mama, cuando el tratamiento resulta más eficaz.

Durante la mamografía, el técnico guía a la paciente en cada paso —desde la colocación correcta hasta el momento en que puede esperar sentir compresión—. Se toman de dos a tres imágenes de cada mama, aunque en algunos casos pueden realizarse imágenes adicionales si se necesita evaluar una zona específica o capturar el tejido mamario completo.

Mamografía de detección vs. mamografía diagnóstica

Una de las preguntas más comunes sobre las mamografías es la diferencia entre los estudios de detección y los diagnósticos.

“Una mamografía de detección es un chequeo de rutina, similar al examen ginecológico anual”, explica la Dra. Venta. “No busca responder una pregunta clínica específica, sino que funciona como una medida preventiva para detectar cualquier anomalía en el seno antes de que aparezcan síntomas. Se realiza cuando a la mujer le corresponde su estudio anual”.

Las mamografías de detección se recomiendan de manera anual a partir de los 40 años para mujeres con riesgo promedio de cáncer de mama. Aquellas con riesgo elevado pueden requerir comenzar antes y realizarse estudios de imagen adicionales. La Dra. Venta describe las mamografías de detección como “una herramienta clave para la detección temprana, con un papel crucial en mejorar los resultados y salvar vidas frente al cáncer de mama”.

Por otro lado, una mamografía diagnóstica se utiliza cuando hay una preocupación específica que necesita una revisión más detallada. Tu médico probablemente la solicitará si presentas síntomas visibles, como una masa en el seno o secreción por el pezón. También puede recomendarse si el radiólogo detecta algo inusual en una mamografía de detección. En una mamografía diagnóstica, se toman imágenes adicionales mientras el radiólogo revisa los resultados en tiempo real.

“Una mamografía diagnóstica se enfoca en una pregunta clínica específica”, comenta la Dra. Venta. “Permite examinar con mayor detalle una zona determinada y, en algunos casos, puede complementarse con un ultrasonido de mama para determinar si es necesario dar otros pasos, como realizar una biopsia o una resonancia magnética (MRI, por sus siglas en inglés)”.

La Dra. Venta detalla tres posibles resultados de una mamografía diagnóstica: “Podemos encontrar algo completamente benigno o normal; detectar una irregularidad que requiera biopsia; o identificar algo probablemente benigno, pero que deba reevaluarse en unos meses”.

Las mismas máquinas se utilizan tanto para mamografías de detección como diagnósticas. Sin embargo, el estudio diagnóstico suele tardar más y puede implicar una dosis de radiación ligeramente mayor, ya que se necesitan más imágenes desde distintos ángulos.

Mamografía 3D vs. mamografía 2D

Otra duda común es si realmente importa hacerse una mamografía 3D o 2D. La respuesta es sí: definitivamente conviene optar por la 3D.

Una mamografía 3D —también conocida como imagen mamaria digital, mamografía digital o tomosíntesis de mama— ofrece una vista mucho más detallada del tejido mamario que una mamografía 2D tradicional.

En una mamografía 2D, la mama se toma desde dos ángulos, lo que a veces puede provocar que el tejido se superponga y oculte pequeños bultos o anomalías. En cambio, la mamografía 3D captura múltiples imágenes digitales desde distintos ángulos, creando una serie de “capas” finas que permiten al radiólogo examinar el tejido mamario capa por capa.

“La mamografía 3D es una tecnología digital muy precisa y eficiente que brinda la imagen más clara posible del tejido mamario y ayuda a detectar tumores muy pequeños”, explica la Dra. Venta. “Esto reduce la posibilidad de que las pacientes sean llamadas para estudios adicionales y mejora la capacidad de detectar cáncer de mama, especialmente en mujeres con tejido mamario denso”.

Al buscar opciones, asegúrate de elegir instalaciones que cuenten con mamografía 3D. Hoy en día la mayoría ya la ofrece, pero vale la pena confirmarlo antes.

No solo importa el tipo: también importa dónde te haces la mamografía

El tipo de mamografía no es el único factor a considerar al agendar una cita. El lugar donde decidas realizarla también tiene gran relevancia.

Algunas preguntas que conviene hacer al elegir un centro de diagnóstico son:

  • ¿El centro está especializado en imagen mamaria?
  • ¿Los radiólogos tienen formación avanzada en radiología mamaria?
  • Además de mamografías de detección, ¿ofrecen mamografías diagnósticas, ultrasonido de mama y biopsias mamarias?
  • ¿Utilizan el equipo más actualizado disponible?
  • ¿El centro forma parte de un sistema de salud más amplio que ofrezca otros servicios de salud femenina, como tratamiento para cáncer de mama?

Una vez que encuentres un centro de imagen mamaria que te genere confianza, procura mantenerte en él.

“Una de las partes más importantes del proceso de mamografía es acudir siempre al mismo lugar para tus estudios”, explica la Dra. Venta. “Eso le permite al radiólogo comparar tus imágenes anteriores. El tejido mamario de cada persona es único, y tener estudios previos facilita detectar incluso los cambios más sutiles en el tejido”.

diciember del 2024